martes, 17 de junio de 2014

Y en la luz, el silencio

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Tan cerca y fascinante se presenta el encuentro, 
 aunque distante y solo el camino del tiempo. 
Aquellos pensamientos ya no adornan mi huerto
 sigo claras señales, abrigo otros proyectos: 
no quiero que me atrapen las redes del recuerdo, 
ni ventilar disfraces o animarlos con gestos.
 La tinta se ha borrado de los viejos cuadernos
y el alma me enamora con diferentes versos. 
Tal vez pueda intentarse nutrir el jardín yerto,
 vigorizar raíces, si en el invernadero 
dormitan hoy inertes bajo el nivel del suelo.
 Pero asoma un carámbano en la fronda del cedro
 con el albo diseño de un duende del deshielo
 y el esbozo indeleble y ambiguo de tu espectro, 
 verde de tantas hojas que al desgaire nacieron...
 Puede en tal circunstancia descubrirte más bello 
y adrede, hasta armonioso o acaso no tan lejos.
 pero fieles me alertan los compases del eco: 
"Ya no hay sombra ni tiempo: allá, memoria y cielo. 
Aquí, nieve y destellos y en la luz, el silencio." 


 





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