Ha sonado tu piano en un rincón del alma
y llueven partituras de las viejas gavetas,
parece que tus dedos volaran como aletas
de un delfín melodioso que con silbos me calma.
Ensueños musicales en mágicas carretas
desgranan sus bemoles y en tu teclado empalma
una antigua rapsodia que la congoja ensalma
con notas armoniosas que ensayan sus saetas,
y místicas se elevan al cielo en rauda fuga
en sonatas llameantes y hechiceros nocturnos,
latiendo en las estrellas que la noche conjuga.
Y la mañana brilla, mamá, cuando entre turnos
evoco tu concierto que me envuelve y subyuga,
pintando de colores mis tiempos taciturnos
pintando de colores mis tiempos taciturnos
Me trajo muy lindos recuerdos!
ResponderEliminarGracias, Unknown, por tus recuerdos, me alegro de que sean lindos.
ResponderEliminarCariños